La ciudad de Valencia vivirá uno de los eventos más significativos para el mundo fallero. Un monumento de 40 metros de altura, que tendrá que ser levantado con la ayuda de 200 personas, será la nueva falla municipal para las Fallas de 2017.
Se prevé que el 11 de marzo, alrededor de las 18.00 horas, tenga lugar la ‘plantà al tombe’ de este gran monumento fallero que, sin duda, pasará a la historia.
Una parte del monumento, salió este sábado en la Cabalgata del Ninot de València.
El equipo de Manolo García presenta “Valencia, Can la Trava”, una sátira humorística de los obstáculos con que se ha enfrentado la ciudad de Valencia durante décadas con referencias a “ todo aquello que se proyectó y nunca se ejecutó debido a las diferentes y numerosas trabas, y que ahora se recupera, se “espolsa”, se plantará y se quemará
La Falla del Ayuntamiento de este año tiene como lema ‘València, Ca la trava’ y pretende contraponer, jugando con el nombre del arquitecto de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, el valenciano Santiago Calatrava, la imagen de una gran ciudad con la de las “trabas” del día a día.
De este modo, basa su ironía “sobre la València de Calatrava” y su sátira “sobre la València de las trabas”. Los creadores del monumento -Manolo García, Manolo Algarra, Julio Monterrubio, Manolo Martín, José Aguilar y Fet d’Encàrrec- aluden con sus imágenes a “la València de Calatrava que se proyectó” y que “nunca se ejecutó por culpa de ciertas trabas”, con elementos que quedaron descartados. El conjunto mostrará “una torre de telecomunicaciones que se proyectó y que nunca se construyó”, así como “una cabalgata folclórica por la que desfilan las trabas que la ciudad asume y ha padecido desde tiempos pasados hasta nuestros días”.
La idea de los artistas es que las sillas que se aporten se coloquen próximas a la plataforma que exhibirá la cabalgata. A este respecto, Paco Pellicer ha destacado la parte “participativa” del montaje de este monumento y ha anunciado “la convocatoria para que quienes quieran aporten sillas de madera” viejas. Ha precisado que la intención es que los ciudadanos “aporten el combustible para que la falla arda, recuperando el espíritu de la ‘estoreta velleta’, del trasto viejo”.
Pellicer ha comentado que la idea de las sillas es también que éstas se vean como las que las personas llevan, “como espectadores”, para ver una cabalgata sentado, en este caso, simulando que es la representada en la falla y “sintiéndose representado” en este conjunto. El artista ha declarado que el monumento contará ya con sillas hechas por sus creadores “con sus chistes pertinentes”.
La fecha en la que los ciudadanos podrán llevar sus sillas hasta la Falla del Ayuntamiento no está aún cerrada y podría ser entre el día 14 de marzo o el 15 de marzo. “Todo el que tenga una silla vieja la puede traer. Hacemos el chiste de que en lugar de llamar al 010 -el teléfono de información del consistorio y de aviso de recogida de enseres-, que nos llamen a nosotros”, ha manifestado Pellicer.