Récords históricos de lluvias por la última dana en España
La reciente DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que afectó a buena parte de la península ibérica ha quedado registrada como uno de los episodios meteorológicos más extremos en décadas. Con precipitaciones récord en diversas regiones, intensas inundaciones y vientos huracanados, este fenómeno ha puesto en alerta a toda España, dejando daños materiales, cortes de carreteras y múltiples incidencias en las infraestructuras.
Una DANA sin precedentes en España
Entre el 11 y el 13 de junio de 2024, la mayor parte del país experimentó los efectos devastadores de una DANA especialmente virulenta. Fue particularmente intensa en el este peninsular, donde varios municipios sufrieron precipitaciones torrenciales que batieron registros históricos.
Este episodio ha sido calificado por los expertos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) como uno de los más severos desde que comenzaron los registros en algunas localidades. De hecho, en algunos puntos del Levante español, como Valencia y Castellón, las estaciones meteorológicas recogieron cantidades de agua en apenas 24 horas que superaron las medias mensuales para todo el mes de junio.
Datos de récord en diferentes regiones
Comunidad Valenciana bajo el agua
La Comunidad Valenciana ha sido uno de los territorios más castigados por el paso de esta DANA. En localidades como Vinaròs (Castellón), se acumularon más de 200 litros por metro cuadrado en menos de 24 horas, lo que ocasionó graves inundaciones urbanas. En Valencia capital, la intensidad de la lluvia colapsó varias vías y túneles, paralizando el tráfico rodado durante horas.
- En Alzira, se superaron los 150 l/m² en pocas horas.
- Xàtiva registró un récord de lluvias desde 1973.
- El aeropuerto de Valencia sufrió retrasos y cancelaciones debido a la baja visibilidad y acumulación de agua.
Cataluña y Aragón también afectados
Mientras tanto, Cataluña no se quedó al margen del impacto. En el interior de Tarragona y el sur de Lleida, los acumulados sobrepasaron ampliamente los 100 l/m². En zonas elevadas como el Pirineo, la lluvia intensa combinada con el deshielo puso en apuros a varios embalses y cauces naturales.
- En Morella (Castellón), se produjeron desprendimientos de tierra por la saturación del terreno.
- En Huesca (Aragón), hubo pequeños ríos que se desbordaron parcialmente.
Datos impactantes en Madrid y Castilla-La Mancha
Más al centro de la península, el fenómeno también dejó huella. Madrid vivió una de sus noches más lluviosas en lo que va de siglo, con registros de más de 80 l/m² en zonas como el sur de la capital. Varios tramos de Metro se vieron afectados y las autoridades pidieron precaución máxima.
En Castilla-La Mancha, la DANA descargó con fuerza en Albacete y Toledo, derribando árboles, afectando suministros eléctricos y dificultando el tráfico rodado y ferroviario.
Comparativa histórica y climatológica
Este violento episodio meteorológico ha sido comparado con otros grandes sucesos climatológicos del pasado. En términos de volumen de precipitación, varios expertos lo equiparan al temporal de octubre de 1982 o la gota fría de septiembre de 2019, que afectó duramente a la Vega Baja del Segura.
¿Cambio climático detrás del aumento en las DANAs?
El aumento en la frecuencia y severidad de las DANAs durante los últimos años ha reabierto el debate científico sobre el impacto del cambio climático en España. Expertos del ámbito meteorológico alertan de un patrón creciente en la formación de estos fenómenos por el calentamiento del Mediterráneo y las fluctuaciones térmicas en altura.
Según AEMET, entre 2011 y 2023 se ha duplicado la aparición de episodios de DANA en otoño y primavera, y cada vez se registran más casos en verano. Estas depresiones, al entrar en contacto con la alta humedad y temperaturas cálidas en superficie, provocan lluvias torrenciales con potencial destructivo.
Consecuencias materiales y sociales
Más allá de los registros meteorológicos, la última DANA ha dejado un importante rastro de consecuencias en municipios de toda España. Varias ciudades declararon situaciones de emergencia ante el caos que generaron las precipitaciones.
- Más de 900 intervenciones de los bomberos en la Comunidad Valenciana.
- Cortes de suministro eléctrico y situaciones de riesgo para la población.
- Desbordamientos de barrancos e infraestructuras colapsadas.
Además, se estima que el coste económico de los daños podría superar los 50 millones de euros, según los primeros informes de las aseguradoras y las administraciones locales.
Infraestructuras afectadas
Las infraestructuras viarias fueron uno de los sectores más impactados por esta DANA. Carreteras nacionales como la N-332 ou la A-3 sufrieron cortes temporales. También hubo incidencias en servicios ferroviarios de Renfe, sobre todo en el Corredor Mediterráneo.
Además, decenas de colegios suspendieron sus clases durante al menos dos días por dificultades en los accesos o por filtraciones en sus instalaciones.
La respuesta de las autoridades ante la emergencia
Los servicios de emergencia, junto con Protección Civil y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, activaron protocolos de intervención inminente para salvaguardar vidas y minimizar riesgos. Gracias a la alianza entre administraciones públicas, se pudo actuar de forma rápida en zonas especialmente vulnerables.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) desplegó efectivos en Alicante y Castellón, donde colaboraron con rescates acuáticos y asistencias a vehículos atrapados.
Planes de mejora y prevención
En vista del impacto considerable de fenómenos meteorológicos como este, distintas comunidades autónomas han reivindicado la necesidad de fondos estatales y europeos para mejorar sus
- redes de drenaje pluvial,
- sistemas de alarma temprana frente a lluvias torrenciales,
- y la educación climática de la ciudadanía.
Se proyectan nuevas inversiones en infraestructura más resiliente y se estudia también una posible reforma de los seguros para dar respuesta más ágil a este tipo de catástrofes naturales.
Recomendaciones para la población
El Gobierno central y las autoridades autonómicas recuerdan a la población la importancia de seguir ciertas recomendaciones básicas en episodios de DANA:
- No utilizar el vehículo durante lluvias intensas.
- Evitar zonas inundables como ramblas, barrancos y túneles.
- Tener a mano linternas, cargadores de móvil y botiquín de primeros auxilios.
- Consultar siempre los avisos de AEMET y las autoridades locales.
Un fenómeno que podría repetirse
Los expertos no solo señalan que episodios como este seguirán produciéndose, sino que podrían intensificarse en los próximos años si las condiciones climáticas y de gestión del territorio no cambian. La combinación de suelos impermeables, creciente urbanización y mayor energía disponible en la atmósfera favorecen la formación de DANAs extremas.
Por este motivo, se hace necesario un enfoque integral en la gestión del riesgo hidráulico y meteorológico, así como una mayor concienciación ciudadana sobre los peligros asociados a estos fenómenos.
Conclusión: un desafío creciente para España
La última DANA que ha azotado España no solo ha batido récords históricos de precipitación, sino que también ha servido como recordatorio del poder de la naturaleza y de nuestra vulnerabilidad ante ella. Con sus consecuencias visibles a todos los niveles —social, económico y medioambiental—, este fenómeno obliga a repensar y reforzar las estrategias de prevención ante fenómenos meteorológicos extremos.