Séptima protesta exige verdad a 7 meses de la dana
La población sale a las calles exigiendo respuestas claras al Consell
Siete meses después de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que sacudió la comarca valenciana de L’Horta, la indignación ciudadana no ha disminuido. Este pasado fin de semana se llevó a cabo la séptima manifestación consecutiva en Valencia, donde centenares de personas alzaron la voz para reclamar transparencia gubernamental y una investigación exhaustiva sobre lo sucedido durante el desastre natural.
Convocadas bajo el lema “Queremos saber la verdad”, las protestas se convierten en un clamor social que pone en tela de juicio la gestión realizada por el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y su equipo de gobierno durante los momentos más críticos de la catástrofe y en los meses posteriores.
Una lluvia de incógnitas tras la DANA
El temporal que azotó la provincia el pasado año dejó imágenes de devastación, viviendas anegadas, infraestructuras dañadas y miles de vecinos evacuados. Más allá de los efectos materiales, lo que encendió la chispa del movimiento ciudadano fue la falta de claridad en la información oficial sobre las actuaciones realizadas por las autoridades y la supuesta inacción ante advertencias previas de organismos meteorológicos.
Estas son algunas de las preguntas que siguen sin respuesta según los manifestantes:
- ¿Por qué no se tomaron medidas preventivas pese a los avisos metereológicos?
- ¿Qué pasó con los sistemas de alerta temprana en las áreas afectadas?
- ¿Quién asume responsabilidades por los fallos en la gestión de la emergencia?
- ¿Dónde están las ayudas prometidas a los damnificados?
Transparencia, el eje de la protesta
El principal reclamo de los manifestantes gira en torno a una palabra: transparencia. La ciudadanía exige que el Consell haga público un informe técnico completo que explique desde un punto de vista profesional y político cómo se abordó la emergencia y qué decisiones se tomaron.
Uno de los portavoces del colectivo ciudadano “Veritat per la DANA”, organizador de las movilizaciones, declaró: “No podemos permitirnos que las instituciones públicas oculten la verdad bajo la alfombra. Si hubo errores, queremos saberlo. Y si hubo negligencias, exigimos consecuencias”.
El papel del presidente Carlos Mazón durante la crisis
Desde el primer día de la DANA, el foco de atención apuntó directamente al líder del Partido Popular en la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón. Muchos consideran que la falta de comunicación efectiva y la tardanza en aplicar medidas de auxilio agravaron la situación de los municipios más afectados, como Albal, Catarroja y Benetússer.
Hasta la fecha, Mazón ha defendido su gestión y ha instado a esperar las conclusiones de los equipos técnicos, aunque no se ha pronunciado sobre la publicación de un informe detallado, lo que ha acentuado las sospechas de falta de voluntad política para esclarecer los hechos.
Críticas desde la oposición
Partidos como Compromís y el PSPV-PSOE han acusado al gobierno autonómico de ocultar información relevante y de gestionar “de forma opaca” los recursos tras la catástrofe. Compromís incluso ha exigido la creación de una comisión de investigación en Les Corts para depurar responsabilidades.
“El silencio institucional es inaceptable. Las familias afectadas no pueden esperar más”, afirmó Joan Ribó, exalcalde de Valencia y actual portavoz de Compromís.
La voz de los damnificados
Durante la protesta, diversos vecinos afectados por la DANA compartieron sus testimonios. Muchos aún viven literalmente entre los escombros de sus hogares, esperando una compensación que, denuncian, nunca llegó.
Entre los relatos más impactantes se encuentra el de Luis Martínez, residente en Catarroja, quien mostraba fotos de su sótano completamente inundado: “Perdí todo lo que tenía en un solo día. Y siete meses después sigo esperando una respuesta. Ni ayuda, ni inspección, ni solución”.
Isabel Alberola, otra damnificada, expresó su frustración: “Sentimos que nadie nos escucha. Que no importamos. Pero seguimos saliendo a la calle para que al menos nuestra dignidad no nos la quiten también”.
Un movimiento que empieza a traspasar fronteras locales
Lo que comenzó como una manifestación vecinal en la comarca de L’Horta se está transformando en un movimiento social de mayor envergadura. Asociaciones cívicas, colectivos ecologistas y entidades universitarias se han sumado a las protestas, poniendo el foco en la necesidad de una gestión pública eficaz ante crisis climáticas que, según señalan los expertos, serán más frecuentes en los próximos años.
Los organizadores han anunciado que no descartarán convocar marchas en otras comunidades afectadas por fenómenos similares, con el fin de visibilizar la fragilidad del sistema de respuesta ante emergencias naturales.
La importancia de una gestión eficaz frente al cambio climático
La DANA de L’Horta no es un hecho aislado. Los modelos climáticos ya anticipan que en la región mediterránea, estas tormentas serán cada vez más intensas y frecuentes. Ante esta realidad, la sociedad exige que los gobiernos estén preparados y sean proactivos en lugar de reactivos.
La Planificación Hidrológica, la inversión en redes de alcantarillado, la mejora de planes de evacuación y la educación medioambiental son algunas de las demandas que se repitieron en pancartas y discursos durante la séptima manifestación.
Según el ingeniero ambiental Jordi Soler: “Eventualmente, no será la primera ni la última DANA que vivamos. Por ello, exigir rendición de cuentas en esta ocasión es clave para evitar que en el futuro se repitan los mismos errores”.
Propuestas para fortalecer la respuesta pública
Durante el acto se expusieron distintas medidas que podrían mejorar la gestión de futuras catástrofes naturales:
- Creación de un centro regional de respuesta climática.
- Digitalización de sistemas de alerta y comunicación ciudadana en tiempo real.
- Revisión urgente de los planes municipales de emergencia.
- Establecimiento de un fondo de emergencia para catástrofes naturales con distribución ágil.
- Formación continua en prevención de riesgos para administraciones locales.
La respuesta del Consell: entre el silencio y la gestión
Hasta el momento, la Generalitat Valenciana ha evitado hacer declaraciones públicas respecto a las últimas protestas. No obstante, algunas fuentes de Presidencia aseguran que se están elaborando bajo confidencialidad una serie de informes técnicos internos que podrían ser presentados a Les Corts a finales de año.
Mientras tanto, la falta de comparecencias oficiales y la escasa comunicación institucional alimentan el sentir de abandono por parte de quienes vivieron la catástrofe en primera persona.
La lucha ciudadana no se detiene
Lejos de apagarse, el movimiento “Veritat per la DANA” ha anunciado que no detendrá las movilizaciones hasta obtener un compromiso formal del gobierno autonómico. Ya se está organizando una octava marcha para el próximo mes, a la que se espera una mayor participación e impacto mediático.
La sociedad valenciana ha demostrado que la memoria colectiva no olvida y que frente a la adversidad encuentra su fuerza en la unidad. Al grito de “¡Ni una DANA más sin verdad!”, las calles de Valencia seguirán siendo testigo de una reivindicación que ya forma parte de la historia reciente de la comunidad.
Conclusión: la exigencia de verdad como motor democrático
Las protestas por la gestión de la DANA en L’Horta no son únicamente un reclamo por errores pasados, sino