Introducción
El polémico envío de la alerta ante la devastadora DANA del 29 de octubre en la provincia de Valencia ha vuelto a poner el foco en la gestión y las decisiones tomadas durante la crisis. Un técnico del sistema ES-Alert, encargado de emitir los avisos masivos a la población, ha declarado que la entonces consellera de Justicia e Interior, Salomé Pradas, solicitó explícitamente que no se enviara ninguna comunicación sin su aprobación previa. Esta petición habría supuesto un retraso crucial en la difusión de un mensaje que podría haber mitigado la tragedia que acabó con más de 200 vidas.
Contexto y cronología de los hechos
El día en cuestión, la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) provocó lluvias torrenciales que desembocaron en una riada histórica. A pesar de la magnitud de la emergencia, el mensaje de advertencia masiva a los móviles llegó pasadas las 20:11 horas, cuando ya se contaban decenas de fallecidos, desaparecidos y personas atrapadas en bajos y garajes.
Según el testimonio del técnico que intervino en el envío de la alerta, tras incorporarse al centro de emergencias a las 14:30 horas, recibió instrucciones directas de Pradas para no emitir ningún aviso sin su autorización expresa. Este hecho, unido a un proceso de debate y elaboración del contenido del mensaje dentro del Comité de Emergencias (Cecopi), dilató la rapidez del envío. Se llegó a descartar un primer texto que alertaba sobre el riesgo del vertido de la presa de Forata, para finalmente emitir un mensaje general para toda la provincia.
Implicaciones del retraso en la alerta
- Se estima que el mensaje enviado no contribuyó eficazmente a la prevención ni al rescate de personas en riesgo.
- El retraso en activar la alarma pública pudo aumentar el número de víctimas y la gravedad de la situación.
- La gestión de la alerta a través del sistema ES-Alert ha sido objeto de investigación judicial por la juez de Catarroja.
Declaraciones y defensas
El técnico ha señalado que la exconsellera Pradas desconocía inicialmente la existencia del sistema ES-Alert, y por tanto actuó con inexperiencia en la gestión del envío. Él mismo relató que la orden de esperar su visto bueno para cualquier mensaje partió de ella, quien además estuvo entrando y saliendo de la sala donde se gestionaba la alerta, retrasando aún más la coordinación.
En contraste, fuentes cercanas a Pradas niegan que se produjera un retraso derivado de su petición de aprobación. Según estas fuentes, el contenido del mensaje fue acordado rápidamente tras un debate técnico en el Cecopi, y el visto bueno se dio de forma inminente. Aseguran que no hubo intención de demora y que el tiempo empleado se debió a la complejidad y los protocolos internos para garantizar la seguridad y precisión del mensaje.
Detalles sobre la gestión del mensaje
- El mensaje fue enviado en castellano y valenciano, descartando una versión en inglés.
- Se evaluaron diferentes borradores y riesgos antes de optar por un comunicado general para toda la provincia.
- La coordinación entre autoridades y técnicos mostró carencias evidentes, según la investigación judicial.
Investigación judicial y contexto político
La juez instructora de la causa ha puesto el foco en la gestión de la emergencia por parte del equipo de la Conselleria, responsabilizándoles de no haber dado una respuesta eficaz ante el desastre natural. La tardanza del aviso y su contenido, cuestionados en sede judicial, han generado un intenso debate político y social, que continúa en torno a la figura de Pradas y otros cargos involucrados.
La exconsellera ha alegado que mantuvo informada a la presidencia de la Generalitat durante la crisis, pero que las decisiones fueron tomadas con la urgencia que el momento exigía, desvinculándose de cualquier retraso consciente.
Conclusión
La declaración del técnico del ES-Alert abre una nueva línea de análisis sobre cómo la burocracia y las decisiones políticas pueden afectar la seguridad ciudadana en situaciones de emergencia. El retraso en la emisión de un mensaje de alerta tan vital ilustra la necesidad de optimizar los protocolos y la formación en el manejo de sistemas de aviso masivo. La tragedia de la DANA de Valencia subraya la importancia de una comunicación rápida, clara y efectiva para proteger a la población en momentos críticos.
La investigación sigue abierta y son muchas las preguntas que aún esperan respuesta, mientras la sociedad exige transparencia y mejoras en la gestión de catástrofes naturales.
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